“Los latinoamericanos son nuestros buenos amigos; es una afirmación de principios que no depende del contexto cambiante de la coyuntura internacional”, aseguró el alto funcionario ruso al ser entrevistado en esta capital por la agencia de noticias Prensa Latina y el canal Telesur.
Acerca del estado de los vínculos con esa región, explicó que Moscú no pretende imponer a ninguno de los países latinoamericanos sus criterios y esquemas; tampoco, dijo, ponerlos ante la necesidad de elegir con quién estar.
Aspiramos a construir nuestras relaciones sobre una base pragmática de complementariedad económica y la necesidad de diversificar la cooperación, apuntó el representante de la Cancillería rusa.
Indicó que Moscú está listo para desarrollar los lazos políticos, económicos, comunitarios y culturales con América Latina en la medida que sus países estén dispuestos a hacerlo con Rusia.
Respecto al fortalecimiento de los intercambios con Venezuela, Nicaragua y Cuba, Schetinin expresó que en estos tiempos, nada fáciles, esas naciones volvieron a demostrar que son verdaderos socios estratégicos que se entienden, se apoyan, y que sobre esa base están listos para construir una cooperación pragmática y activa.
Para nosotros esos países constituyen un ejemplo inquebrantable de valor frente a las presiones de las sanciones extranjeras, subrayó.
En tal sentido, puso de ejemplo a Cuba y su enfrentamiento por más de 60 años del bloqueo económico, financiero y comercial estadounidense que “no ha podido doblegar el espíritu de ese noble pueblo”.
El jefe del departamento América Latina de la Cancillería rusa aseguró que su país enfrentará las más de seis mil sanciones de Occidente y avanzará en todos los sectores.
“Por supuesto, hay nuevas realidades, hace falta ajustar nuestra cooperación a las nuevas realidades mundiales, pero estamos seguros de que sobre esta base seremos más independientes, más fuertes y más activos en la cooperación”, enfatizó.
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