En entrevista concedida al periódico, el director de la multilaureada creadora de contenidos digitales con sede en Atenas, denuncia que en Europa y Estados Unidos privatizan la censura como si hubiera una puerta giratoria entre Facebook, Instagram, Twitter, Google y TikTok, los gobiernos occidentales y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Lo peor es que, en nombre de la lucha contra la desinformación se reprime a los medios críticos, señala al asegurar que la han intensificado enormemente contra Redfish.
Dogru dijo que sus contenidos están prohibidos a nivel mundial y en Facebook e Instagram sus cuentas están bloqueadas en la Unión Europea, Estados Unidos y el Reino Unido.
En la entrevista exclusiva con La Jornada, Dogru explicó que fundaron Redfish en 2017 con periodistas de diferentes medios de comunicación.
Nuestra audiencia son los pueblos oprimidos de todo el mundo, cuyas historias son completamente ignoradas o marginadas por los medios occidentales.
Hacemos reportajes de izquierda radical y documentales en video independientes de partidos, gobiernos o empresas, desde el punto de vista de los oprimidos y para mostrar la realidad en que la mayoría de las personas en todo el mundo se ven obligadas a vivir.
En los últimos cinco años, dijo, este trabajo ha sido reconocido por millones de espectadores y seguidores en todo el mundo, especialmente en América Latina, y premiado en festivales de cine y la Academia Internacional de Artes y Ciencias Digitales.
Denunció que en todas las plataformas nos etiquetaron falsamente como “medios controlados por el Estado ruso”, lo que provoca que la visibilidad de nuestro contenido sea restringida, diciendo que violamos sus reglas aunque las respetamos y por eso nunca brindan evidencia de sus acusaciones.
A pesar de esto, pudimos hacer crecer significativamente el número de seguidores efectivos. Nuestros lectores interactúan constantemente con nuestro contenido a un ritmo mucho más alto que las principales plataformas de medios como la BBC, Vice News, Deutsche Welle, etcétera.
Aseguró que desde el inicio de la operación militar rusa en Ucrania, las medidas de censura en su contra han llegado a niveles extremos. En YouTube estamos prohibidos a nivel mundial y en Facebook e Instagram nuestras cuentas están bloqueadas en la Unión Europea, Estados Unidos y el Reino Unido.
Sólo podemos asumir que estas medidas son el resultado de la política desarrollada dentro de la Unión Europea durante los últimos cinco años, en las que aplican medidas enérgicas contra los medios que critican a los gobiernos occidentales.
Puso dos ejemplos: el director global de Política de Contenido de Facebook, Mark Smith, fue asesor del comandante adjunto de la OTAN. El director de Seguridad y Confianza Pública de Google, Ben Randa, fue el planificador estratégico y oficial de información también de la OTAN.
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