El evento quedó oficialmente inaugurado por el director general de la FAO, QU Dongyu, y el presidente ecuatoriano, Guillermo Lasso, quienes estuvieron acompañados de otras autoridades de estado y de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura (FAO).
«Estamos en un momento crítico para el mundo. Lo afrontamos con una hoja de ruta clara: transformar los sistemas agroalimentarios para hacerlos más eficientes, inclusivos, resilientes, sostenibles”, aseguró en la ceremonia el director general de la FAO, QU Dongyu.
De su lado, el mandatario ecuatoriano sentenció: “Esta Conferencia es un foro extremadamente importante para debatir retos y prioridades relacionadas con la alimentación y la agricultura, y coordinar juntos la protección de los recursos alimentarios”.
En su calidad de presidente de la 37 conferencia regional del ente, el ministro de Agricultura y Ganadería de Ecuador, Pedro Álava, aseveró que la crisis alimentaria obliga a planificar nuevas estrategias con la participación de toda la cadena productiva.
La cita comenzó el lunes 28 de marzo, con sesiones de altos funcionarios extendidas por dos días, sobre seguridad y soberanía alimentaria, agroalimentación, impacto del cambio climático, reducción de pobreza, producción nacional, acceso a agroinsumos y otras.
También evaluaron el Programa de trabajo plurianual de la Conferencia Regional para América Latina y el Caribe para 2022-25.
Las tres jornadas restantes estarán enfocadas en los ejes: mejor producción, mejor nutrición, mejor medio ambiente y una vida mejor sin dejar a nadie atrás.
Los delegados también definirán las prioridades para adaptar y localizar el Marco Estratégico 2022-2031 de la FAO en la zona, donde según datos oficiales de la Organización, al menos 60 millones de personas padecen hambre.
Inclusión, resiliencia, eficiencia y sostenibilidad son algunos de los términos recurrentes en la reunión, que Ecuador acoge por segunda ocasión tras 73 años de haber sido sede del primer encuentro, efectuado en septiembre de 1949.
La Conferencia, que se realiza cada dos años, reúne en esta ocasión a representaciones de los 33 estados miembros, entre ellos Antigua y Barbuda, Argentina, Bahamas, Barbados, Belice, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Dominica, Ecuador, El Salvador, Granada, Guatemala, Guyana, Haití, Honduras, Jamaica, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay y Perú.
Completan la lista República Dominicana, San Cristóbal y Nevis, San Vicente y las Granadinas, Santa Lucía, Surinam, Trinidad y Tobago, Uruguay y Venezuela.
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