Según el organismo, la decisión es la única posible y menos restrictiva debido a las circunstancias sin precedentes y la emergencia a las que enfrenta el movimiento paralímpico en la actualidad ante la operación militar especial de Rusia en Ucrania.
Desde el IPC consideran «inviable» la opción de que rusos y belarusos compitan como atletas neutrales y recuerdan la experiencia en los recientes Juegos Paralímpicos de Invierno de Beijing, en los que no participaron debido a la negativa de muchos países de intervenir en la lid si lo hacían ellos.
Con la medida, la IPC aspira a mantener los propósitos fundamentales del organismo consagrados en su constitución.
Entre ellos, garantizar que en el deporte practicado dentro del movimiento paralímpico prevalezca el espíritu de juego limpio, se prohíba la violencia, se gestione el riesgo para la salud de los atletas y se apoyen las relaciones humanas y culturales universales entre las naciones por la necesidad de una coexistencia pacífica de sus pueblos.
Los deportistas paralímpicos de Rusia y Belarús no podrán participar en los campeonatos de atletismo, natación, snowboard, tiro, halterofilia, danza deportiva, hockey sobre hielo, esquí alpino, biatlón y esquí de fondo.
La decisión de la IPC es provisional y puede ser revocada o modificada en cualquier momento si la situación cambia, por lo tanto, esta medida permanecerá bajo revisión constante por parte del Consejo de Gobierno del Comité Paralímpico Internacional.
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