Una medida aplaudida por todos los partidos políticos, aunque con veladas críticas de la centroderecha que afirma llega tarde. Después de ser levantada la restricción en exteriores, ahora llega la casi eliminación del uso obligatorio de este aditamento para frenar la expansión de la Covid-19.
En realidad, la nueva normativa será aprobada tras el cierre de las vacaciones por Semana Santa, que cuenta además con los días feriados del 14 y 15 de abril, indicó la ministra de Sanidad, Carolina Darias, quien habló al respecto con autoridades de los gobiernos autonómicos.
Darias apuntó que el barbijo dejará de ser obligatorio en interiores a excepción de «aquellos espacios en los que puede haber personas con vulnerabilidad: centros de salud, hospitales, centros sociosanitarios -residencias- y en los transportes».
En declaraciones a medios de prensa locales, la titular subrayó que de todas formas existirá una «recomendación de uso responsable, especialmente cuando hay aglomeraciones de personas y cuando se trate de personas vulnerables”, y aclaró que tampoco en las escuelas se exigirá la mascarilla.
El hecho de contar España con el 92,5 por ciento de la población con doble pauta de vacunación y una inmensa mayoría con la dosis de refuerzo, junto con la reducción de la incidencia, facilitaron la medida, según defendió Darias.
Hace una semana, España continuó con la relajación de las medidas en torno a la pandemia y eliminó la cuarentena para los casos leves o asintomático, con la dinámica de tratar la enfermedad como una gripe endémica.
Desde el inicio de la pandemia, España registró 11,6 millones de personas contagiada, con más de 103 mil fallecidos.
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