Redadas en la ciudad de Coblenza, región de Renania-Palatinado (oeste), permitieron el arresto de los sospechosos y durante los operativos fueron incautadas armas, municiones, dinero en efectivo, lingotes de oro y monedas de plata, según fuentes policiales.
Entre los objetivos de los extremistas estaba además la destrucción de instalaciones de suministro eléctrico para provocar un apagón en todo el país y crear «condiciones similares a la de una guerra civil”, de acuerdo con las investigaciones.
El ministro de Salud germano Karl Lauterbach, presunto blanco de los arrestados, declaró a la prensa no sentirse intimidado y afirmó que algunos negacionistas de la pandemia de la Covid-19 no luchan contra las vacunas o contra las restricciones, sino contra el orden democrático.
Este caso muestra la división de nuestra sociedad, afirmó Lauterbach y agregó que recuperar la confianza de la población es su objetivo político.
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