De acuerdo con Georg Meyer, un alto funcionario de seguridad en el estado federal de Turingia, es probable que siga una segunda ola de arrestos, pues las autoridades investigadoras aún examinan las pruebas.
Meyer también acusó a la extrema derecha Alternativa para Alemania, que incluye a una de las detenidas, Birgit Winkemann, de alimentar teorías de conspiración.
Sin embargo, el propio partido condenó el plan de golpe de Estado supuestamente planeado por el grupo de extrema derecha.
En vísperas de redadas a gran escala contra la extrema derecha en Alemania, más de 20 personas fueron detenidas.
Los fiscales alemanes aseguraron que los sospechosos supuestamente crearon el año pasado una organización terrorista con el objetivo de derrocar el sistema estatal existente y reemplazarlo con su propia forma de estado, pues ya estaba en proceso de creación. El departamento agregó que este grupo estaba dirigido por Heinrich P.R, de 71 años, y Rüdiger V.P., de 69 años.
Según el diario Spiegel, el primero es miembro de una familia noble y el segundo es un ex paracaidista.
Las autoridades sugieren que el grupo planeaba atacar el edificio del Bundestag(Parlamento alemán), tomar como rehenes a diputados y atacar centrales eléctricas para provocar cortes de energía con el fin de socavar la posición del gobierno actual, crear las condiciones para una guerra civil, derrocar al gobierno federal y apoderarse del poder.
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