La propuesta legislativa prevé cambios en la terminología de las leyes que estuvieron vigentes en Ucrania desde la época soviética, así como la suspensión de los actos legales adoptados bajo el mandato de la URSS.
Según el texto, deberán ser reemplazados términos como “economía nacional” por economía de Ucrania, “obreros” por trabajadores, “agregados” por equipos, entre otras palabras que eran usadas durante su pasado socialista.
Además, propuso excluir de las leyes del país las menciones a la URSS, la República Socialista Federativa Soviética de Rusia, y reemplazar el antiguo nombre de “República Soviética Socialista de Ucrania” por Ucrania.
Las autoridades rusas denunciaron en reiteradas ocasiones las acciones del Gobierno ucraniano para borrar su historia pasada como parte de la desaparecida URSS, incluyendo un aumento de la rusofobia y la intolerancia hacia todo lo ruso, incluso en el campo de la educación, la cultura y de los lazos históricos entre ambas naciones.
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