La cifra, que refiere el porcentaje de personas en edad de trabajar que tiene un empleo, sea asalariado o autónomo, aumentó cinco décimas durante el último trimestre del año hasta quedar solo dos décimas por debajo de los niveles previos a la pandemia de Covid-19.
Durante ese período la tasa creció en cuatro quintas partes de las naciones miembros, detalló el organismo en un comunicado.
En sentido general, los países de América Latina cerraron el año con niveles más bajos que los europeos con la excepción de Grecia (59,2 por ciento) e Italia (59,4).
Si bien Turquía reportó la tasa más baja (51,8 por ciento), también estuvieron de la media hacia abajo naciones latinoamericanas como Costa Rica (58,7), Chile (60,2), Colombia (61,4) y México un 61,9 por ciento.
En el otro extremo de la tabla, los únicos miembros del bloque que registraron cifras por encima del umbral del 80 por ciento fueron Suiza (80,1), Países Bajos (80,8) e Islandia (81,8).
Por el contrario, España reportó un 63,9, cinco décimas más que en el tercer trimestre, pero sustancialmente por debajo de la media de la entidad.
La OCDE es un organismo de cooperación internacional compuesto por 38 estados, que establece como objetivo coordinar políticas económicas y sociales que favorezcan la prosperidad, la igualdad, las oportunidades y el bienestar para todas las personas.
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