Dijo que la central sindical Pit- Cnt asistió a una reunión convocada por el Poder Ejecutivo en un contexto de pérdida del poder adquisitivo y una inflación que supera la proyectada que afectó a cerca de 300 mil trabajadores en cerca de 80 sectores de actividad.
“Para nosotros es indispensable también ajustar el salario mínimo nacional porque hay muchos trabajadores sin formalizar para los que el salario mínimo es un elemento clave que se utiliza para ajustar sus ingresos” reclamó, en desacuerdo con el gobierno.
Bermúdez analizó una primera reunión celebrada horas atrás con la presencia de empresarios, para adelantar el proceso negociador salarial de la que dijo que “hubo más dudas que certezas”
Reiteró que para el movimiento sindical la convocatoria a discutir la caída salarial es válida y necesaria, “pero eso no significa que vaya a resolver la situación de pobreza y de gente que come en ollas populares, como vemos a lo largo y ancho del país”, afirmó.
El gobierno propuso como paliativos ante la inflación y carestía, un aumento del tres por ciento para jubilados, y un dos por ciento para empleados públicos y la sugerencia al empresariado privado a que haga lo mismo.
Para economistas, tanto del opositor Frente Amplio como de otras filiaciones políticas, se trata de medidas tardías e insuficientes para aplicar a partir del 1 de julio venidero, mientras los precios de la canasta básica continuarán en una predecible espiral.
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