Según explicó el funcionario este lunes en la Cámara de los Comunes, el lote de carros Stormer fabricados en Reino Unido ya está en camino a ese país de Europa del este.
Wallace refirió que el conservador británico suministro a Ucrania más de cinco mil cohetes antitanque, cinco sistemas de defensa antiaéreo equipados con más de un centenar de misiles, mil 360 municiones para demoler estructuras y 4,5 toneladas de explosivo plástico.
Los envíos incluyen, además, 250 misiles antiaéreos Starstreak, 90 mil raciones de alimento, material sanitario, tres mil chalecos antibalas, 77 mil cascos y tres mil pares de botas, agregó el titular de Defensa.
Durante el debate en la Cámara Baja el diputado laborista John Healey, quien se desempeña como contraparte de Wallace en el llamado gabinete a la sombra (opositor), cuestionó, sin embargo, la calidad de las armas suministradas por Reino Unido, y pidió entregarle a Kiev equipos modernos.
Rusia comenzó dos meses atrás lo que el presidente Vladimir Putin calificó como una operación militar especial en Ucrania, luego que las autoridades de las autoproclamadas repúblicas de Donetsk y Lugansk le solicitaran ayuda para repeler el aumento de la agresión y los bombardeos por parte de las Fuerzas Armadas ucranianas.
Antes, Moscú reconoció la independencia y soberanía de ambos territorios, y firmó tratados de amistad, cooperación y asistencia mutua con sus líderes, los cuales incluyeron el establecimiento de relaciones diplomáticas y la ayuda militar.
El Reino Unido, Estados Unidos, la Unión Europea y el resto de los aliados de la Organización del Tratado del Atlántico Norte acusan a Putin de lanzar una invasión en gran escala contra el país vecino, e implementaron sanciones económicas y financieras contra Rusia.
Aunque asegura que no entrará en combate contra las tropas rusas, la alianza noratlántica incrementó el suministro de armamento a los militares ucranianos, incluido el controvertido batallón Azov, integrado por elementos ultranacionalistas y extremistas.
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