Esa joven fuerza política sacó provecho del creciente descontento hacia el actual gobernante, según la prensa local.
El SDS, considerado como nacionalista de derecha, obtuvo algo más del 24 por ciento de los votos, frente al 34 por ciento de su rival.
Ese resultado otorgaría a los vencedores, con Robert Golob a la cabeza, unos 40 escaños en el legislativo, once más que el SDS.
Los electores quieren un cambio, proclamó Golob en su primer discurso, según la agencia de noticias Bloomberg.
El antiguo directivo empresarial de 55 años agregó que las primeras conversaciones sobre la futura coalición se producirían en los próximos días y que el SDS y el partido Nueva Eslovenia no están en la lista.
De su lado Jansa felicitó a Golob y lamentó que «no todos los partidos que trabajaron con la coalición de una forma u otra se unieran».
La Asamblea Nacional de Eslovenia consta de 90 escaños, por lo que el umbral de la mayoría absoluta se sitúa en los 46.
Según analistas Golob no tendrá dificultades para alcanzar esa cifra y en tal escenario el actual primer ministro deberá abandonar el cargo que ocupa desde 2020 y que también ostentó en otras dos ocasiones, (2004-2008) y (2012-2013).
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