El comisionado de la NBA, Adam Silver, destacó a Lanier entre los pívots más talentosos y dominantes de la liga en los años 70 del pasado siglo, con promedios de 20,1 puntos y 10,1 rebotes en 14 temporadas, divididas entre Detroit Pistons y Milwaukee Bucks.
«Por más de 30 años, Bob sirvió como nuestro embajador global y asistente especial tanto para (el excomisionado) David Stern como para mí, viajando por el mundo para enseñar los valores del deporte y lograr un impacto en la juventud», declaró Silver.
Nacido el 10 de septiembre de 1948, Lanier fue una estrella colegial con los Bonnies de St. Bonaventure, a los que guió en 1979 al «Final Four», la gran final del baloncesto universitario en Estados Unidos.
Amén de su talento, que le permitió disputar ocho Juegos de las Estrellas, Lanier era célebre por usar zapatillas talla 22, un pie sin parangón en la liga, el cual le dio problemas durante su carrera, lastrada por lesiones ortopédicas.
Además, en las postrimerías de su carrera profesional fungió como presidente del sindicato de jugadores, y jugó un role medular en la negociación de trascendentales convenios colectivos.
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