Las estadísticas muestran que a causa del consumo de sustancias ilegales fallecieron más de 107 mil estadounidenses por sobredosis de drogas el año pasado, una cifra 15 por ciento mayor que lo registrado en 2020.
Existe una espiral de muertes en los últimos años en el país y según Nora Volkow, directora del Instituto Nacional para el Combate al Abuso de Drogas, eso es realmente espeluznante.
El alza marcada del problema que convierte a Estados Unidos en el mayor consumidor de drogas del mundo se acrecentó en la década de los 90 con prevalencia a la adición de analgésicos opioides, pero en los últimos años floreció un comercio y consumo desenfrenado de la heroína y el fentanilo.
Los registros muestran que el fentanilo, un opioide sintético desarrollado para combatir síntomas del dolor crónico, fue el mayor causante de los decesos con 71 mil 238, un incremento del 23 por ciento en relación al año anterior.
En abril el gobierno del presidente Joe Biden anunció una estrategia nacional de control de drogas para abordar la crisis por adicciones no tratadas y el narcotráfico.
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