La aplastante victoria fue tan evidente que ni siquiera hacen falta argumentos para convencer que la escuela cubana de boxeo es una de las mejores del mundo, y eso quedó demostrado con las victorias logradas, cinco de ellas por la vía rápida en el ring del Palenque de la Feria de San Marcos, Aguascalientes, en el centro de México. El único por decisión unánime fue Lázaro Álvarez.
Los héroes de la jornada fueron en súper plumas: Osvel Caballero, en súper ligeros: Lázaro Álvarez, en súper welters: Roniel Iglesias, en súper medianos: Yoenlis Hernández, en semicompletos: Arlen López y en crucero Julio César La Cruz, quienes hicieron historia al coronar con sus respectivos éxitos la fecha en la que Cuba ingresa al profesionalismo en ese deporte.
Y lo hizo en un país de fuerte y larga tradición boxística y de grandes campeones como Juan Zurita, Vicente Saldívar, Rubén Olivares, Miguel Canto, Salvador Sánchez, Julio César Chávez, Érik Morales, Marco Antonio Barrera y Juan Manuel Márquez, a quienes se unen los actuales Saúl Canelo Álvarez, Andy Ruiz, Leo Santa Cruz, Julio César Rey Martínez, Emanuel Vaquero Navarrete, y Juan Francisco Gallo Estrada.
México exhibe una impresionante lista de 201 campeones mundiales absolutos en las 16 categorías de los cuatro organismos del boxeo rentado: CMB, AMB, FIB Y OMB, y ha sido en esta tierra de grandes glorias a la que vinieron los muchachos formados en la Escuela de Educación Física y Deporte, Manuel Fajardo, en Ciudad de la Habana, y entrenados en la Finca de los Monos, a demostrar su indiscutible calidad.
Los seis ganadores de hoy son resultado directo de la Escuela Cubana de Boxeo al frente de la cual estuvo durante años el inolvidable doctor Alcides Sagarra, quien aplicó un método científico generador de campeones de la talla de Teófilo Stevenson, Felix Savón, Mario Kindelán, Roberto Balado, Héctor Vinent o el actual Julio César la Cruz, por citar solo algunos.
De esa escuela, surgieron 32 campeones olímpicos, 63 campeones mundiales (mayores de 19)
y 64 titulares mundiales juveniles, y a esa camada pertenecen estos que han hecho este viernes 20 de mayo historia en el Palenque de la Feria de San Marcos, en Aguascalientes.
Los mexicanos pudieron apreciar en este primer cartel profesional con la media docena de púgiles que se estrenan en ese rango, los resultados de una escuela reconocida mundialmente la cual no solamente brilló en la formación de excelentes profesionales, sino en su filosofía de humanizar un deporte que hasta la irrupción de Cuba en sus arenas internacionales era tratado como un espectáculo medieval propio del coliseo romano.
Con esa escuela, que interpuso la inteligencia a la violencia, la técnica a la brutalidad, el boxeo tomó nuevas alturas e incluso el feroz profesionalismo también sintió su influencia y adoptó nuevas reglas, que son las que imperan hoy, para eliminar aquellas trágicas carnicerías con las cuales los magnates del ring hacían sus enormes fortunas.
Los muchachos de Cuba demostraron en Aguascalientes que hasta deportes violentos por naturaleza pueden y deben tener un comportamiento digno y que se disfrute más por su técnica y estilos que por la contundencia de los golpes.
Esta visión fue expresada muy claramente en Aguascalientes por el crucero Julio César La Cruz al expresar que “nosotros no miramos la parte económica ni lo que pueda aportarnos el boxeo profesional en ese tema, sino que estamos mirando que en el amateur lo hemos ganado todo”.
“Ahora queremos empezar a caminar por este mundo profesional, convocar a los mejores boxeadores del mundo y enfrentarnos a ellos para poder confirmar lo que hemos hecho en el sector amateur. Vamos a entrar en la historia de Cuba y será un honor”, añadió.
Expertos del patio consideran que la escuadra cubana cumplió con las expectativas creadas y Cuba puede ingresar con confianza en este nuevo terreno de los puños y las cuerdas con la misma confianza y solidez que lo ha hecho en estos últimos 62 años en los cuadriláteros del mundo en el boxeo aficionado.
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