Según el reporte del portavoz de ese ente castrense, Ígor Konashénkov, a consecuencia de las embestidas aéreas fueron eliminados más de 300 combatientes ucranianos y destruidos 46 equipos bélicos.
En las últimas 24 horas, la Fuerza Aeroespacial de este país golpeó con misiles de alta precisión el puesto de mando de la 14 brigada mecanizada, un centro de comunicación, un centro radiotécnico de las Fuerzas Armadas de Ucrania y dos puestos de defensa aérea.
Por su parte, las unidades antiaéreas rusas derribaron un helicóptero Mi-8 y 11 drones ucranianos.
Konashénkov indicó que los misiles de Moscú golpearon los talleres de producción de la planta Motor Sich, en la ciudad de Zaporozhie, que fabricaba motores para los aviones y drones de la Fuerza Aérea de Kiev.
Subrayó además que el Ejército de este país atacó los refuerzos enemigos que se dirigían a la región de Donbass.
El portavoz militar ruso destacó que el puerto de la ciudad de Mariúpol, en la autoproclamada República Popular de Donetsk, fue completamente desminado y comenzó a operar con normalidad, luego de ser liberada de las tropas ucranianas.
La víspera, el Ministerio de Defensa de Rusia declaró que los zapadores de la Flota del Mar Negro y las tropas de ingeniería terminaron el desminado del territorio del puerto de Mariúpol.
Explicó que durante el desminado fueron inspeccionadas 134 estructuras, lo que permitió encontrar y desactivar más de 12 mil objetos explosivos y armas abandonados por los militares ucranianos.
Las medidas aplicadas permitieron poner en funcionamiento las estructuras de ingeniería hidráulica y los equipos de navegación en los accesos y las aguas del puerto de Mariúpol.
De tal forma, los canales de navegación y las áreas acuáticas interiores de la dársena fueron limpiados de buques hundidos y otros obstáculos para la navegación.
La cartera de Defensa rusa señaló que en total fueron revisados más de 1,5 millones de metros cuadrados de superficie acuática, 18 atracaderos y 32 buques.
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