De acuerdo con el magistrado presidente del Tribunal Electoral(TE), Heriberto Araúz, al dejar inaugurada la carrera electoral -que durará unos 23 meses-, se cumplió con el artículo 330 que establece el llamado para el sufragio el 1 de junio del año tras anterior al de la consulta.
El funcionario, cuya gestión concluye en noviembre de este año, ofreció garantías de pulcritud del proceso y pidió a los ciudadanos que emitan un voto responsable, que descarte de plano el populismo y el clientelismo.
Mientras, el presidente de la República, Laurentino Cortizo, manifestó que la responsabilidad del Ejecutivo es garantizar los recursos necesarios para el plan de Elección General, en correspondencia con los preceptos legales y los principios democráticos.
Los panameños decidirán en las urnas al nuevo presidente y vicepresidente del país, 20 diputados al Parlamento Centroamericano (Parlacen), 71 diputados a la Asamblea Nacional, 81 alcaldes, 701 representantes de corregimiento y 11 alcaldes, todos con sus respectivos suplentes, para el período del 1 de julio de 2024 al 30 de junio de 2029.
Según el reglamento, con la solicitud de inscripción para candidatos por libre postulación, el pasado miércoles, comenzó el proceso en el istmo.
Hasta el 31 de julio próximo transcurrirá un período clave para los llamados candidatos independientes, mientras la recolección de firmas para esos postulantes iniciará el 15 de agosto próximo y concluirá el 31 de julio de 2023.
Sobre estas elecciones, movimientos populares como el Frente Nacional por la Defensa de los Derechos Económicos y Sociales (Frenadeso) cuestionaron el cronograma y sus normas; y apuntaron que las reformas al Código Electoral están viciadas y apuntan a un fraude seguro.
En alusión a comicios anteriores, desigualdad, autoritarismo, la ineficiencia de los mecanismos y plataformas de inscripción que se prestan para la trampa, las encuestas amañadas y medios de comunicación abiertamente parcializados que regalan tiempo a candidatos de su preferencia, son otros de los aspectos cuestionados.
En la semana también sobresalió el informe de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) que alertó sobre el incremento en los últimos días de indicadores de la Covid-19 en el país, en especial la cifra de hospitalizados.
Según una nota de la institución, hasta el 28 de mayo la ocupación hospitalaria crece en el istmo en relación con las dos semanas anteriores, y llegó al 58 por ciento (tres mil 281 camas de un total de cinco mil 690) de 55 por ciento en etapa precedente.
El estudio de la OPS precisa que se han incrementado además las muertes por la dolencia. En la última semana hubo 26 defunciones, mientras del 15 al 21 de mayo se registraron solo 18.
También en los últimos siete días se realizaron en esta capital dos jornadas de diálogo para fomentar alianzas estratégicas del desarrollo entre representantes de la Unión Europea y Centroamérica, además del foro internacional sobre Juventud y Empleo.
En los debates la presidenta de la Fundación Europea-América Latina y el Caribe, Leire Pajín, instó a consolidar los sistemas públicos, para fortalecer la inserción social y cuestionó el acceso desigual a las tecnologías y las vacunas, como otro de los aspectos a atender a futuro.
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