La monarca de 96 años de edad apareció brevemente en el balcón del Palacio de Buckingham, acompañada del príncipe Carlos y de su nieto Guillermo, primero y segundo, respectivamente en la línea de sucesión al trono, al final de un desfile popular en el que participaron alrededor de 10 mil personas.
La marcha, que estuvo encabezada por el famoso carruaje dorado de la realeza británica, recorrió más de tres kilómetros por el centro de Londres, hasta desembocar en la avenida The Mall, engalanada para la ocasión con decenas de banderas británicas.
En un guiño a la modernidad de un reinado que muchos tildan de caduco, un holograma de la reina saludó a la multitud desde el interior de la carroza cubierta por láminas de oro y tirada por ocho caballos.
El desfile, que incluyó autos antiguos, personas disfrazadas y ocho autobuses de dos pisos, recreó las siete décadas de reinado de Isabel II, quien ostenta el récord de ser la monarca con más tiempo en ocupar el trono de Inglaterra.
Al final de la tarde, el joven y popular cantante local Ed Sheeran cerró el espectáculo, que fue presenciado por el príncipe Carlos y otros miembros de la realeza desde un palco construido en las afueras del palacio.
El Jubileo de Platino comenzó el jueves pasado con un desfile militar y un sobrevuelo de aviones por el centro de Londres, únicas actividades que fueron presenciadas por Isabel II desde el balcón de su residencia londinense.
Ese mismo día, el servicio de prensa de la familia real anunció que la monarca, quien sufre de problemas de movilidad, sintió algunas molestias, y se ausentaría de la misa de acción de gracias celebrada el viernes en la catedral de San Pablo.
Isabel II tampoco asistió el sábado a una carrera de caballos ni al espectacular concierto con estrellas de la música británica e internacional organizados en su honor.
La cuarta y última jornada del Jubileo de Platino incluyó miles de almuerzos populares y fiestas callejeras en todo el Reino Unido.
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