El Boeing 747-300 de la empresa Emtrasur, subsidiaria de la aerolínea Conviasa, arribó a esta nación el 6 de este mes con 19 tripulantes (14 venezolanos y cinco iraníes) y una carga consistente en piezas para compañías del sector automotor.
La aeronave intentó continuar viaje hacia Uruguay, pero fue denegado su ingreso a ese país y debió regresar al aeropuerto internacional de Ezeiza, en la provincia de Buenos Aires.
En declaraciones a una emisora radial local Rossi descartó la existencia de irregularidades vinculadas a la nave o sus tripulantes y acusó a la alianza opositora Juntos por el Cambio de difundir información falsa, en la cual se relaciona al Boeing con el terrorismo.
El titular de la AFI pidió a esa agrupación tratar el tema con seriedad y detener los intentos de generar pánico en la población.
No existen pedidos de captura ni alertas rojas sobre los tripulantes y en las inspecciones realizadas no se encontraron irregularidades. La situación vivida en los últimos días responde a una decisión política del gobierno de Estados Unidos y a sus acciones contra las empresas de venezolanas, señaló.
Asimismo, explicó que las restricciones impuestas a Conviasa son resultado del bloqueo financiero norteamericano contra Venezuela, como parte del cual se amenaza con sanciones a quienes colaboren con dicha entidad.
mgtgas