“Los consideramos totalmente responsables de que la paz no haya llegado todavía a la tierra de Donbass, a la tierra de Ucrania, de que no hayamos podido avanzar por la vía de la negociación en realidad desde mediados de abril”, dijo al canal de televisión Rossiya 1.
Recordó que desde ese momento el diálogo bilateral se puso en pausa, debido a las incitaciones enviadas a Kiev “por sus supervisores, titiriteros de Occidente”.
Según el viceministro ruso de Asuntos Exteriores, eso es un reflejo del interés por hacer fracasar las oportunidades de una solución pacífica, además de un intento de demostrar por la fuerza en el campo de batalla que Rusia está equivocada.
Riabkov confirmó que las negociaciones entre Moscú y Kiev están en este momento congeladas por decisión de las autoridades ucranianas.
Declaró además que su país considera extremadamente negativo que Estados Unidos suministre a Ucrania armas pesadas, incluidos lanzacohetes múltiples, posición que la parte rusa comunicó a Washington en reiteradas ocasiones y de diferentes maneras.
El vicecanciller ruso advirtió que en más de una ocasión Moscú también alertó que los convoyes con armas para Kiev serían objetivos legítimos para las Fuerzas Armadas de este país.
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