Los reclamos se hicieron mediante movilizaciones realizadas en varias ciudades del país, en el marco de las jornadas de paro nacional que se desarrollan por tiempo indefinido, desde el pasado lunes 13 de junio.
Quito y Guayaquil, las dos ciudades más pobladas de Ecuador, así como Cuenca, fueron algunas de las urbes elegidas por los maestros para exigir la implementación de la Ley Orgánica de Educación Intercultural (LOEI), que fue resultado de una lucha de años de los profesores, incluidas dos huelgas de hambre.
En las marchas en la capital los profesores estuvieron acompañados por pancartas, banderas y a través de consignas exigieron el respeto a sus derechos.
«No a la criminalización de la lucha social» y «Publicación de la equiparación salarial en el Registro Oficial», fueron los dos pedidos con los cuales los maestros iniciaron la manifestación, a la cual se unieron estudiantes universitarios y profesionales de la salud desvinculados.
La marcha se dirigió hacia el centro histórico, donde se unió a otro grupo de protestantes, quienes salieron desde otro punto de Quito.
En Azuay, los reclamos tuvieron lugar en los exteriores de la Gobernación, a donde acudieron además afiliados al Frente Popular y alumnos de educación superior.
Al respecto, Nelson Erazo, presidente del Frente Popular, informó que continuarán con las movilizaciones, las cuales se unirán a la jornada de marchas del Frente Unitario de los Trabajadores, previstas para el 22 de junio venidero.
Este fue el cuarto día consecutivo de protestas populares iniciadas por la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie) a fin de exigir al gobierno respuestas a una agenda de 10 puntos considerados sensibles para la clase trabajadora.
Congelar los precios de los combustibles a valores más bajos que los actuales, mayor control estatal para evitar especulación con los productos del agro, así como una moratoria de deudas para los campesinos y pequeños agricultores, son algunos de los tópicos abordados en el texto.
Frenar las actividades mineras, mayor presupuesto para la educación y la salud y medidas eficaces contra la creciente inseguridad nacional son otros de los puntos sobre los cuales los pueblos y nacionalidades esperan pronunciamientos.
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