De acuerdo con la Agencia de Seguridad Sanitaria de Reino Unido (Ukhsa), el poliovirus fue detectado durante una inspección de rutina en la planta de tratamiento de Beckton, que brinda servicios a unos cuatro millones de personas.
El virus fue detectado solo en las muestras de aguas residuales, y no se ha reportado ningún caso relacionado de parálisis, aseveró la entidad estatal, la cual informó que inició una investigación para determinar si hay algún tipo de transmisión a nivel comunitaria.
La Ukhsa explicó que cada año se suelen encontrar de una a tres muestras en todas las aguas residuales del país, pero la detección de dos en la misma planta entre febrero y abril hace pensar que podría existir algún nivel de propagación entre individuos cercanos entre sí.
En el pasado, las detecciones se producían cuando una persona que regresaba al país tras recibir en el extranjero una vacuna oral viva contra la poliomielitis, expulsaba el virus en sus heces, agregó.
Aunque aseguró que ahora se trata de un poliovirus tipo 2, derivado de las vacunas que en muy raras ocasiones provoca síntomas graves de la enfermedad en quienes no están inmunizados, las autoridades sanitarias británicas recomendaron a la población comprobar su estatus de vacunación.
El último caso de poliomielitis en Reino Unido data de 1984, y el país se declaró libre de la enfermedad en 2003.
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