De acuerdo con un artículo publicado en el diario La Repubblica, la nueva entrega podría efectuarse en unas semanas, tras finalizar el proceso de aprobación supervisado por el Comité Parlamentario para la Seguridad de la República (Copasir) y el Ministerio de Defensa.
Los días 21 y 22 de junio últimos el primer ministro de este país, Mario Draghi, reafirmó ante el Senado y la Cámara de Diputados, respectivamente, que su Gobierno mantendrá su actual política en relación con el conflicto en Ucrania, de apoyo a las instituciones de ese país incluyendo el suministro de armas.
El texto presentado por Draghi ante ambas instancias parlamentarias fue acordado por los partidos de la coalición gubernamental tras fuertes debates, según observadores, pues dos de esas fuerzas, el Movimiento 5 Estrellas (M5S) y La Liga, consideran que continuar los envíos de material bélico alejaría la paz.
El jefe de Gobierno sostuvo que Italia, con sus socios de la Unión Europea y del Grupo de los Siete, “tiene la intención de continuar apoyando a Ucrania” en el conflicto entre esa nación y Rusia,y su estrategia se mueve en dos frentes, respaldar a Kiev e imponer más sanciones a Moscú.
Esta nueva entrega de armamento podría incluir, según la fuente, obuses de tracción FH 70 capaces de batir objetivos a 30 kilómetros de distancia, así como sistemas MLRS, uno de los medios más solicitados por lo ucranianos, con un alcance de hasta 80 kilómetros.
Gianluca Ferrara, senador del M5S opuesto a continuar la entrega de armas a Ucrania, demandó ante Draghi una mayor participación del Parlamento en la formulación de la posición de su gobierno sobre ese conflicto bélico, “incluida la decisión de enviar nuevos suministros militares.”
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