Es la octava vez consecutiva que Bangladesh ocupa la primera posición en este acápite en el sur de Asia pero su clasificación general descendió seis puestos, pasando del 65 en 2021 al 71 en 2022 entre los 146 países incluidos en la encuesta.
Las mujeres de Bangladesh registraron un descenso en la paridad general de género en el país debido a la disminución del nivel educativo.
En el parámetro de logros educativos, el país cayó dos escalones, hasta la posición 123.
Sin embargo, en el parámetro de salud y supervivencia, mejoró su clasificación, pasando del puesto 134 en 2021 al 129 este año, aunque su puntuación se mantuvo sin cambios.
En cuanto al empoderamiento político, Bangladesh descendió a la novena posición desde la séptima registrada en 2021, aunque su puntuación no varió entre los dos años.
Mientras, en el índice de participación y oportunidades económicas ocupa el puesto 141.
Según el informe, la brecha global de género se cerró en un 68,1 por ciento y al ritmo actual de progreso se necesitarán 132 años para alcanzar la plena paridad.
Entre las ocho regiones incluidas en el informe, el sur de Asia es la que ocupa el lugar más bajo, con sólo un 62,3 por ciento de la brecha de género cerrada en 2022.
Bangladesh y Nepal lideran el desempeño regional con más del 69 por ciento de sus brechas de género cerradas.
De acuerdo con la investigación, el progreso hacia el cierre de la brecha de género se estancó en la mayoría de los países.
Solo 30 de las 145 naciones cubiertas tanto en 2021 como en 2022 registraron avances en este tema en al menos un punto porcentual.
Islandia, seguida de Finlandia, Noruega, Nueva Zelanda y Suecia fueron los cinco primeros países del mundo con la menor brecha de género, mientras Afganistán se situó en el último lugar y Pakistán en el segundo con la mayor brecha de género medida en cuatro parámetros identificados.
El Índice Global de la Brecha de Género mide las puntuaciones en una escala de 0 a 100 y las puntuaciones pueden interpretarse como la distancia recorrida hacia la paridad.
Dicho parámetro examina la diferencia entre hombres y mujeres en cuatro categorías fundamentales: participación y oportunidades económicas, logros educativos, salud y supervivencia, y empoderamiento político.
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