Este martes fue necesaria la movilización de dispositivos aéreos y terrestres para intentar extinguir un incendio forestal declarado al mediodía en el término municipal de Valdepeñas de la Sierra (Guadalajara) y que alcanzó nivel dos.
La posible afección a bienes de naturaleza no forestal y por humo a la población, son las consecuencias más perceptibles del siniestro, que se suman a una treintena dispersos en distintas regiones de la nación ibérica.
Por otro lado, la falta de lluvias provocó una disminución sensible del agua en embalses en España hasta los 24 mil260 hectómetros cúbicos, lo que supone una bajada de 1,2 por ciento respecto a la semana pasada, para colocar la reserva hídrica española al 43,2 por ciento de su capacidad total.
Pocas o ninguna precipitación es también un elemento de alarma, según indicó el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
Guadalquivir, al 26,4 por ciento de su capacidad; Guadiana, al 27,5, y la de Guadalete-Barbate, al 29,9, son las cuencas más impactadas.
A tono con este fenómeno, el Gobierno aprobó este martes las Orientaciones Estratégicas sobre Agua y Cambio Climático, una estrategia que busca proteger el líquido vital frente a las adversidades meteorológicas.
La ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, dijo a la prensa que “estamos viendo periodos de alta sequía y al mismo tiempo se están produciendo las mayores inundaciones de nuestra historia».
Rodríguez en una rueda de prensa tras el Consejo de Ministros apuntó que igualmente el ejecutivo abordó medidas para paliar las olas de calor y prevenir los incendios.
Más de 500 personas fallecieron en España en los últimos 10 días como consecuencia de una segunda ola de calor, que aparentemente termina si bien mañana miércoles volverán a subir los termómetros.
La Agencia Estatal de Meteorología comentó que los valores alcanzados durante los últimos días en toda la península se calculan entre 39 y 45 grados Celsios.
mgt/ft