Según un informe presentado por esa entidad financiera, la mayor parte del impacto en la economía alemana se notaría a lo largo de 2023, como consecuencia de los recortes de producción y el daño a la confianza económica.
Además, la inflación podría aumentar en unos dos puntos porcentuales en promedio en 2022 y 2023, señala el documento.
Investigadores del FMI acotaron que “estas pérdidas económicas serían permanentes en el sentido de que no se ‘recuperan’ aplazando la producción, el consumo o la inversión a años posteriores”.
Esta semana, el presidente ruso Vladímir Putin dijo que Europa volverá a recibir gas a través del gasoducto Nord Stream, pero advirtió que, a menos que se resuelva la disputa sobre las piezas sancionadas, los flujos se verán fuertemente limitados.
Previamente, la Unión Europea aprobó seis paquetes de sanciones contra Rusia que incluyen restricciones comerciales a diversos productos, incluido el petróleo y el gas natural.
Varios expertos alertaron que la intensidad de la guerra económica contra Rusia tendrá consecuencias nefastas para la economía mundial, un escenario donde existen factores y condiciones para el estallido de otra crisis en 2022.
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