Galamba calificó la propuesta de Bruselas como “insostenible”, porque obliga a su país a quedarse «sin electricidad», según el diario luso Expresso.
«Eso no puede aplicarse a Portugal. Portugal está en contra de esta propuesta de la Comisión, porque el plan no tiene en cuenta las diferencias entre los países. Estamos completamente en contra», sostuvo Galamba.
Según el funcionario, Bruselas no tuvo en cuenta que la península ibérica es una región con unas infraestructuras de abastecimiento energético muy diferentes a las de otros países miembros de la Unión Europea.
La medida, que forma parte del plan de ahorro ‘Save gas for a safe winter’ (Ahorra gas para un invierno seguro), busca crear una red de seguridad para las naciones europeas más vulnerables que ayude a «sobrevivir el invierno» en caso de un cese total del flujo del gas ruso.
Este ahorro en principio sería voluntario, pero se convertiría en obligatorio si se produce un mayor agravamiento de la situación energética.
Esto significa que los países deberán estar preparados para compartir sus reservas de gas con otros.
España mostró, además, su categórica objeción a la propuesta de Bruselas.
«Defendemos los valores europeos, pero no podemos asumir un sacrificio sobre el que ni siquiera nos han pedido opinión previa», dijo la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera.
mem/hml