La ministra de Salud lusitana, Marta Temido, una de las más cuestionadas y peor valorada del gobierno de Antonio Costa, dijo que las carencias de la red sanitaria ya existían y se mantendrán este verano, reprodujo la televisión estatal de Lisboa.
Los problemas del sistema se traducen en el cierre o el funcionamiento limitado de los servicios de urgencias y de obstetricia en nueve hospitales de todo el país debido a la falta de médicos y en esperas que pueden superar las seis horas para los usuarios.
Los cierres de las urgencias en zonas del interior obligan a los pacientes a recorrer largas distancias en busca de atención médica.
El secretario general del Sindicato Independiente de Médicos de Portugal, Jorge Roque, explicó que esta crisis responde a la falta de inversión en el Servicio Nacional de Salud y a las condiciones salariales de los profesionales que trabajan en las instalaciones públicas.
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