Según la revista médica British Medical Journal, los científicos descubrieron que la pérdida del olfato puede persistir en el 5,6 por ciento de los pacientes, mientras que el 4,4 puede no recuperar el sentido del gusto.
La tasa de rehabilitación aumentó a los seis meses, alcanzando un máximo del 96 por ciento los que perdieron el olfato, y de un 98 los que experimentaron afectación en el gusto.
Los expertos señalaron que las mujeres tenían menos probabilidades de recuperar el sentido del olfato y del gusto que los hombres.
En el caso de los que vivieron con más intensidad el problema de la capacidad olfativa y con congestión nasal tenían menos posibilidades de sanar.
Una de las pacientes estuvo sin el poder oler pasado los 27 meses desde la infección inicial.
Los investigadores albergan la esperanza que la mayoría de los pacientes recuperen el sentido del olfato o del gusto en los tres primeros meses, pero otros corren el riesgo de desarrollar una disfunción duradera, un hecho que requerirá un tratamiento personalizado y seguimiento a largo plazo.
mv/joe