Un fenómeno atmosférico que se mantendrá hasta miércoles o jueves y se espera no sea tan devastador como las anteriores olas de calor, que dejaron un saldo de más de dos mil fallecidos y alrededor de 120 incendios forestales.
El alivio llegará con lluvias y tormentas esta semana, un anticipo que se vivió el sábado cuando en casi todo el país ibérico descendieron los termómetros ante intensos aguaceros.
Así los pronosticó la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), que por intermedio de su portavoz, Rubén del Campo, señaló que en las últimas horas, no obstante, las temperaturas sobrepasaron los 40 grados.
Andalucía es el foco principal de las máximas, aunque también en casi todo el territorio nacional el promedio se instaló en unos 37 grados Celsio.
Lo peor es que el descenso en las noches es lento y puede mantenerse en unos 28 grados hasta bien entrada la madrugada.
Las consecuencias han sido fatales. El Instituto de Salud Carlos III dijo este lunes que entre el 1 y el 29 de julio, se han producido nueve mil 687 muertes más de las esperadas para ese periodo, de las que dos mil 124 son atribuibles a las altas temperaturas.
Por grupos de edad, los mayores de 75 años son el grupo de riesgo, en particular sobre los 85 años. En realidad, son estimaciones hechas a partir de un modelo de cálculo matemático, pero bastante cercano a lo ocurrido por el calor.
«Despedimos el mes julio con temperaturas en ascenso y tormentas localmente fuertes en puntos de la mitad este peninsular y se prepara un mes de agosto con otro episodio de temperaturas muy cálidas, sobre todo durante la primera quincena del mes», reveló el vocero de Aemet.
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