Las iniciativas, adoptadas la víspera en el Consejo de Ministros, responden más bien a un llamado de la Unión Europea (UE) ante el riesgo de que Alemania, locomotora de la economía del bloque comunitario, acelere el riesgo de recesión a partir de su dependencia del gas de Rusia.
La cercanía del otoño y la persistencia de la guerra en Ucrania crisparon los nervios en la UE y si bien España tiene almacenadas importantes reservas de gas, se suma a la petición solidaria hecha por Bruselas.
El tema desató una polémica a raíz de declaraciones de la presidenta de la Comunidad de Madrid (gobernación), Isabel Díaz Ayuso, que se expresó en rebeldía y anunció que no acatará las ordenanzas del Ejecutivo, arguyendo que apagar vitrinas y reducir luminarias públicas “afea a la ciudad”.
Ayuso, que apela con frecuencia a una suerte de discurso provocador estilo Donald Trump, fue duramente criticada por expertos e integrantes de la administración de centro izquierda que encabeza Pedro Sánchez.
Como respuesta indirecta, la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, remarcó este martes que en septiembre el Gobierno tomará «medidas adicionales» para profundizar en el ahorro y la eficiencia energética.
Dijo que España debe estar en sintonía con el resto de países europeos y necesitarán “ir más allá”.
En entrevista con la cadena radial SER, Calviño señaló que las medidas adoptadas ayer son imprescindibles, pero se requerirán de otras para lograr mayor autonomía energética y servir de reservorio para el resto de Europa.
«Hay prepararse para lo peor, pero esperando por supuesto que no suceda», anotó al repasar un posible escenario de recesión.
Por su lado, Teresa Ribera, vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, se pronunció porque todos «cumplan con la ley y los esfuerzos que nos piden desde Europa».
Respondió así directamente a la actitud de Díaz Ayuso, figura del conservador Partido Popular (PP) con ínfulas electorales, en torno a controlar la temperatura en los edificios públicos, espacios comerciales y culturales, estaciones de tren y autobús y aeropuertos, y regulación de las luminarias.
«No es algo a tomarse con frivolidad (…) me gustaría que alguien con tamaña responsabilidad asuma sus funcionarios (…), no me gustaría que señalaran a España como uno de los países más insolidarios de Europa”, valoró Ribera en entrevista con la cadena Telecinco.
El plan de ahorro del Gobierno contempla el ajuste de los termostatos en 27 grados en verano y que no superan los 19 en invierno en los edificios administrativos, espacios comerciales y culturales, estaciones de tren y autobús y aeropuertos.
Asimismo, deberán apagarse luces de los escaparates (vitrinas) a partir de las 22:00, hora local, como las luminarias de los espacios públicos cuando no estén en uso.
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