Nacido hace 18 años en Camagüey, el delantero, aunque de baja estatura, se eleva a base de coraje y ganas, y su actuación en el torneo de Apertura de la élite de la mayor de las Antillas le aseguró un espacio en el Pre-Mundial celebrado en Honduras.
Cuba, ubicada en el grupo de la muerte llegó a liderar el apartado en las dos primeras fechas clasificatorias tras vencer sorpresivamente a Canadá 1-0, y luego golear a Saint Kitts y Nieves con seis anotaciones.
Martín fue el autor del único tanto del partido inaugural para los cubanos, y charló con Prensa Latina sobre el torneo y las expectativas futuras.
“Para mí fue esta una gran oportunidad. Gracias a Dios puede anotar ese primer gol que nos dio la victoria en un juego que parecían subestimarnos, e incluso intentaron pitarnos tres penales en contra, pero había VAR y eso no fructificó”, comentó. Confiesa que de inicio se mostraron incómodos, pero luego fluyeron las cosas.
“Tenemos un gran colectivo de entrenadores que hicieron muy buena estrategia y nos dieron toda la confianza para ese partido. Estuvimos en dificultades, ellos no concretaron y luego yo pude hacer aquel gol”, expresó.
¿Y cómo fue aquello de terminar como portero? “Yo recuerdo que solo lo había hecho en una copa infantil no más, no sabía. Pero contra Canadá habíamos agotado todos los cambios, era el minuto 72 y expulsan al portero, y dije que yo mismo, entonces mis compañeros me dijeron que no me preocupara que no iban a tirarme dentro de los tres palos. Y así fue”.
No fue solo la suerte, el buen trabajo hizo que en la segunda presentación Cuba tomara ventaja final de seis por cero ante Saint Kitts, aunque al cierre caería con el a la postre campeón, Estados Unidos.
“Por decisión técnica descansamos los titulares, ello nos costó el juego por tres goles sin anotar. Casi escogimos rival para luego perder también en octavos de final con Panamá.
“Nosotros ya no teníamos complejo de jugar con esos jugadores que son profesionales a esa edad, y nos decíamos que también nosotros tenemos que hacerlo bien para llegar ahí, y ante Panamá fuimos víctimas de la desesperación”, puntualizó.
Para enfrentar ese nivel la selección sub20 de Cuba había pasado previamente por Uruguay, dónde una serie de topes amistosos ayudaron al equipo a subir el nivel.
“Esa gira fue crucial para mí en lo personal. Hice cinco goles y luego dos en Honduras, siento que hice el trabajo y ahora sueño con la selección de mayores”, manifestó el joven atacante.
A Kevin el torneo Pre-Mundial le abrió las puertas de una futura carrera profesional.
“Ahora hay una posibilidad de contratación en Costa Rica con el Santos Guápiles aunque ellos tienen que manejar bien el número de extranjeros, es una oportunidad para poner el nombre de Cuba en alto, y siempre digo a mi familia que el tiempo de Dios es perfecto, queda prepararme todos los días el doble”, concluyó.
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