Fotos PL: Yoel Ramos Salazar
Ayer viernes, la Catedral Primada del centro histórico de esta capital fue escenario de la presentación de esta agrupación imprescindible de la música colombiana y cuyos invitados especiales fueron Méndez y Ospital, quien es considerado uno de los mejores cultores en el mundo de este antiguo instrumento.
Fue una simbiosis de música, sensibilidad y virtuosismo en un espacio propicio para este tipo de conciertos que no suelen ofrecerse con mucha frecuencia.
En entrevista con Prensa Latina, el director cubano, quien fundó la Orquesta de la Universidad de las Artes, agradeció la invitación a estas presentaciones en el contexto del aniversario 55 de la Filarmónica de Bogotá.
«Para mí fue un placer y un honor que me hayan invitado a estas jornadas con presencia de músicos cubanos que me antecedieron como los maestros y pianistas José María Vitier y Marcos Madrigal, y que seguirá con la maestra Dayana García», expresó.
Al referirse al trabajo con la Orquesta Filarmónica de Bogotá, cuyo director general es David García, afirmó que es muy bueno compartir con músicos de un alto nivel, que reaccionan muy rápido a cualquier sugerencia, y el diálogo en ese sentido ha transcurrido muy bien, tanto en los pocos días de ensayo como en el concierto de este viernes.
Expresó que cuando le dijeron que trabajaría con la orquesta colombiana y con Thomas Ospital, que es un músico de renombre internacional con una carrera impresionante sintió «un un doble orgullo y un doble placer».
«Normalmente para un director de orquesta no es común este repertorio (que incluye el órgano), no se hace mucho porque no siempre está el espacio: tener un buen instrumento en una buena iglesia, con una buena orquesta, son factores que no se unen siempre y tener la posibilidad de hacerlo ahora en Colombia, es un sueño como músico también», subrayó Méndez.
Detalló que el concierto para órgano lo escogió Thomas y él, el resto del programa con música de Felix Mendelssohn, un compositor alemán que dedicó la mayor parte de su corta vida a rescatar la música de Johann Sebastian Bach.
Todo el programa que hemos escogido tiene que ver con la iglesia, la Obertura de Obertura de San Pablo, toda su conversión hacia el cristianismo, dijo Méndez quien tiene una rica carrera desarrollada en La Habana, Estados Unidos, Austria y Alemania.
También elegimos la Sinfonía de la Reforma sobre la conversión del catolicismo al protestantismo, y dentro de la cual se pueden escuchar corales católicos, protestantes, música judía, porque los padres de Mendelssohn y su familia eran de origen judío, añadió.
«Entonces es una simbiosis tremenda, eclecticismo, politeísmo dentro de la música que al final es eso, alguien puede tener la creencia que quiera, pero al final todos somos seres humanos y todos compartimos la misma esencia que es la vida, así que más allá de cualquier región la música nos une», enfatizó.
Méndez fundó en 2009 la Orquesta de la principal institución supeior docente de las artes en Cuba, adjunta al Lyceum Mozartiano de La Habana y desde ese entonces la agrupación ha crecido mucho, tanto cuantitativamente como cualitativamente.
Actualmente cuenta con unos 60 músicos de alto nivel profesional y muchos de los que han pasado por ella tocan en grandes orquestas del mundo «y eso para mí es un orgullo tremendo», manifestó Méndez, un músico de gran sencillez, muy apasionado por su trabajo, y un profesionalidad admirable.
La presentación del viernes fue ovacionada una y otra vez por la calidad de la interpretación del programa en esta espectacular trilogía, que desbordó de hermosos acordes a la Primada de Bogotá.
Hoy, también en esta ciudad, la iglesia El Divino Salvador recibirá a los grandes artistas en otro concierto que promete ser excelso para los propios músicos y para el público de esta ciudad que exhibe una multiculturalidad especial.
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