Los merengues debutarán el 6 de septiembre en el campo de su primer rival, el Celtic de Glasgow dentro del grupo F, que comparte también con el Shakhtar Donetsk ucraniano y el Leipzig alemán.
Sin embargo, para el mismo día al Sevilla se le puede atragantar el estreno, nada menos que contra el poderoso Manchester City que lidera ahora el prodigio noruego Erling Halaand, en la llave G en la que también aparecen el Borussia Dortmund y el Copenhague.
Los otros dos cuadros españoles en la Champions League, arrancarán el 7 de septiembre. En casa, lo harán el Atlético de Madrid frente al Oporto, y del Barcelona, que recibe al Viktoria Plzen, en los grupos B y C, respectivamente.
El doble duelo de mayor morbo en la competición, Bayern de Munich-Barcelona, se desarrollará los días 13 de septiembre en Alemania y 26 de octubre en la capital catalana. Los bávaros son considerados la bestia negra de los azulgranas, sobre todo después de la memorable humillación 8-2 en 2020.
En la Europa League, el programa comenzará el 8 de septiembre con los dos clubes españoles convocados a la cancha el Betis frente al Helsinki en Finlandia, y la Real Sociedad ante el Manchester United en tierras inglesas.
La Conference League, que llega a su segundo año de vida, tiene al Villarreal como único representante español, que debuta en el grupo C el 8 de septiembre contra el Lech Poznan en su sede de Polonia.
En un año atípico por la Copa Mundial de Qatar en los meses de noviembre y diciembre, las lides europeas exigirán a los conjuntos participantes una planificación exquisita y minuciosa, para evitar que las lesiones y el cuidado individual de los jugadores no perjudique a las ligas nacionales.
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