Durante una conferencia de prensa en la sede del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP), en esta capital, Gloria La Riva, coordinadora de la iniciativa, explicó que una vez se conoció la tragedia en la base de supertanqueros matancera, la coalición Answer y el Proyecto hicieron una convocatoria de emergencia para recibir donaciones.
El resultado a la vista es fruto del esfuerzo colectivo de personas y organizaciones en territorio estadounidense deseosas de extender su respaldo material a la isla en este momento, añadió.
Según comentó, la carga entregada con éxito contiene bolsas de sueros, sets de administración intravenosa, guantes quirúrgicos y antibióticos, entre otros recursos.
Señaló que uno de los mayores obstáculos en la capacidad del país antillano para comerciar con el mundo y recibir cualquier respaldo humanitario tiene que ver con su inclusión en la lista de países patrocinadores del terrorismo.
La Riva dijo que no hay justificación para que se le cuelgue a Cuba esa etiqueta, cuando en realidad “Estados Unidos es el culpable del terrorismo” y reiteró que el presidente Joe Biden debe levantar el bloqueo.
Lo mismo pidió la doctora Leni Villagómez Reeves, quien consideró que Donald Trump casi al término de su presidencia en enero de 2021 con la inclusión en esa lista puso en práctica “otra arma para atacar a Cuba”.
Sobre la solidaridad, la integrante de las Caravanas de Pastores por la Paz expresó que “estamos siguiendo humildemente el ejemplo que nos ha dado (la nación del Caribe)”.
Proveedores de salud y activistas por la justicia social preocupados por los efectos nocivos del bloqueo económico de Estados Unidos a Cuba forman parte del Proyecto Hatuey
(Health Advocates in Truth, Unity and Empathy), que, por cierto “tiene un nombre muy apropiado”, apuntó La Riva.
Cuando se formó la sigla a partir del inglés se percataron de que Hatuey fue el cacique cubano quemado en 1512 en la hoguera por los colonizadores españoles y fue por su actitud un símbolo de rebeldía y resistencia.
En julio La Riva estuvo en Cuba junto a un grupo de jóvenes, ocasión en la que trajeron también una donación de vitaminas y medicamentos muy necesarios en 133 hogares maternos de la isla.
El pasado 5 de agosto una descarga eléctrica impactó en uno de los depósitos de combustible de la base de supertanqueros matancera ubicada a unos 140 kilómetros al este de La Habana, provocado el peor incendio registrado en la historia nacional.
Tras un esfuerzo combinado de Cuba, Venezuela y México el 12 de agosto fue extinguido el siniestro, que dejó un saldo de 16 muertos, más de un centenar de lesionados y cuantiosos daños materiales.
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