La presidenta de la mencionada instancia, la representante Carolyn Maloney, envió una carta a la agencia adscrita al Gobierno federal donde pide, además, una declaración del magnate que legitime la entrega de todo el material sensible indebidamente sustraído.
«A la luz del grave riesgo de que el Sr. Trump aún retenga registros gubernamentales confidenciales en Mar-a-Lago o en sus otras propiedades, insto a NARA a buscar una certificación personal de que entregó todos los registros retirados de la Casa Blanca después de dejar el cargo y que usó ilegalmente «, refirió Maloney citada por la cadena de noticias CNN.
Según manifestó, en dicho documento el exgobernante debe ofrecer garantías de que no realizó copias o reproducciones de los archivos, y donde descarte la transferencia de material gubernamental a instancias no autorizadas.
La funcionaria demandó además que la agencia realice una revisión urgente de los expedientes recuperados para evaluar cuantos podrían estar aún en manos del expresidente.
El 24 de agosto, el personal de NARA informó al comité que la agencia no está segura de si todos los registros presidenciales están en su poder, según la misiva de Maloney.
La carta señala también que el exasesor de seguridad nacional de Trump, John Bolton, expresó su preocupación de que el expresidente «pudiera haber transferido documentos clasificados a otros clubes, como Bedminster National Golf Club, donde recientemente organizó un torneo de golf profesional al que asistieron ciudadanos extranjeros».
Durante la víspera, los abogados del magnate rechazaron la idea de funcionarios del Buró Federal de Investigaciones de que hubiera algún posible daño por mal manejo de los materiales y argumentaron que la indagación es “una disputa de almacenamiento de textos que se salió de control”.
Paralelamente a la investigación en curso del Departamento de Justicia, que condujo a la búsqueda de la propiedad de Trump en Mar-a-Lago el mes pasado y a la incautación de miles de documentos, el Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes realiza su propia indagación sobre el manejo de los registros presidenciales por parte de Trump.
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