Según el exfiscal Geoffrey Berman, el DOJ, bajo el mandato del exgobernante, impulsó a su oficina a presentar casos penales contra el exsecretario de Estado John Kerry y otras figuras consideradas como opositores de Trump.
El presidente del Comité Judicial de la Cámara Alta, el demócrata Dick Durbin, informó que daba la “bienvenida a la indagación” y enfatizó en que la conducta fue tan escandalosa que urge arrojar luz sobre ella.
Berman, quien fue fiscal del Distrito Sur de Nueva York (SDNY) desde 2018 hasta que se vio obligado a dimitir en 2020, alega que el DOJ remitió a su despacho un caso penal que apuntaba a Kerry días después de que Trump atacara en dos tuits al exsecretario por comunicarse con funcionarios iraníes.
El Departamento de Justicia sugirió que el SDNY citara a Kerry mediante un estatuto de 1799 que nunca fue procesado con éxito, dijo Berman.
De igual forma, mencionó que su oficina perseguía cargos derivados de una declaración de culpabilidad del exabogado de Trump Michael Cohen.
También citó una investigación sobre el exfuncionario de la Casa Blanca Stephen Bannon, acusado y posteriormente indultado antes de que el magnate republicano dejara la Casa Blanca, precisó un reporte del diario The Hill.
Durbin escribió al fiscal general, Merrick Garland, y pidió al Departamento de Justicia que proporcione documentos relacionados con las afirmaciones de Berman, específicamente los elementos relacionados con Cohen y Kerry.
“Las declaraciones de Berman indican desviaciones sorprendentes e inaceptables de la misión del DOJ y agravan las preocupaciones”, señaló el senador en un comunicado.
El Partido Demócrata ha aprovechado las oportunidades para destacar la conducta del expresidente y convertirlo en impopular entre muchos votantes independientes, aunque el magnate sigue sin confirmar si competirá otra vez por la presidencia en 2024.
El Buró Federal de Investigaciones registró la residencia de Trump en Mar-a-Lago el pasado 8 de agosto bajo sospechas de que violó la Ley de Espionaje y cometió otros delitos como obstrucción de la justicia y manejo criminal de registros gubernamentales.
Además de la investigación del DOJ sobre los documentos que el expresidente llevó a su residencia tras dejar el Despacho Oval, entre estos más de 100 clasificados, la Cámara de Representantes solicitó una pesquisa para determinar cuántos registros gubernamentales estarían todavía en posesión de Trump.
La conducta del republicano en torno a las elecciones de 2020 y el asalto del 6 de enero de 2021 al Capitolio probablemente volverá a la palestra pública antes de los comicios intermedios del próximo 8 de noviembre, pues un panel de la Cámara Baja centrado en estas indagaciones planea reanudar su trabajo.
mgt/cgc
