A través de esta propuesta, la primera de su tipo en Europa, psiquiatras de Bruselas recurrirán al arte y la cultura para ayudar a tratar a pacientes con estrés, depresión o agotamiento, confirmó la vicealcaldesa para asuntos de cultura y turismo, Delphine Houba.
Explicaron que el proyecto cumple el doble objetivo de promover el acceso a la cultura de públicos vulnerables y disponer de una herramienta adicional como parte del tratamiento terapéutico.
Con una duración de seis meses, los resultados de la iniciativa serán evaluados para determinar si podrá extenderse para incluir lugares como el Museo Real o el Bozar, con jurisdicción federal.
Sobre la aplicación de las prescripciones, se informó que los médicos deberán indicar en la receta qué museo desea visitar el paciente y cuántas personas, familiares u otras personas cercanas lo acompañarán.
Una vez que el médico la firme, la ciudad de Bruselas se encargará de pagar sus entradas y las de hasta tres acompañantes que podrán acceder a los espacios culturales.
El psiquiatra Vincet Lustygier, del Hospital Universitario Brugmann, centro encargado de la aplicación del proyecto, aseguró que las artes ayudan a todos los seres humanos a olvidar que somos seres mortales.
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