La primera ministra, Mia Mottley, intercambió con el jefe de la misión del FMI en el país, Bert van Selm, para discutir la extensión del Servicio Ampliado de dicha institución, así como acceso al Servicio de Resiliencia y Sostenibilidad (RSF, siglas en inglés).
Mottley apuntó que su Gobierno acude a esta entidad financiera internacional con el fin de obtener 130 millones de dólares de financiación para un nuevo programa de Recuperación y Transformación Económica de Barbados.
Indicó que las negociaciones intentan que la nación acceda a otros 210 millones de dólares en el marco del RSF. Asimismo, la mandataria presentó en el encuentro un informe sobre el progreso de las iniciativas políticas de su Gobierno en ámbitos como la importancia de la reconversión de la mano de obra de la isla, las iniciativas de energía renovable y la propuesta de reforma de las pensiones públicas.
En tanto, el representante del FMI destacó que la economía de la nación caribeña está en un «marco macroeconómico muy motivador que da lugar a un debate más interesante», y trasladó las motivaciones de su equipo de trabajar en el país.
La entidad financiera internacional aprobó en octubre de 2018 un acuerdo de cuatro años con Barbados por 290 millones de dólares, las conversaciones actuales tienen lugar nueve días antes de que expire su vigencia.
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