Asimismo, aseguró que por eso su gobierno pide a la administración estadounidense que cese la injusticia «porque lo único que hizo Cuba fue ofrecer un espacio para que hubiera finiquitado un proceso de paz».
En declaraciones a la prensa en New York donde se encuentra en el contexto de su participación en el segmento de alto nivel del 77 período de sesiones de la Asamblea General de la ONU, manifestó que apoya una iniciativa de 80 congresistas colombianos para sacar a Cuba de esa lista.
Recordó que cuando se realizaban los diálogos de paz durante el gobierno de Juan Manuel Santos en Ecuador y el gobierno de ese país cerró espacios para esas negociaciones, Cuba aceptó ser sede de las negociaciones entre el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el Estado colombiano.
Se firmaron los protocolos, precisamente con Noruega y Cuba y después cuando el gobierno de Iván Duque decidió sabotear el proceso de paz hecho por Santos, entonces el gobierno de Donald Trump le cobró a Cuba ser sede de las negociaciones e incluyeron al país caribeño en un listado para sancionarlo, añadió.
«Nosotros hemos reabierto esas negociaciones tal cual las dejó el gobierno de Santos, hemos recuperado los protocolos, la situación internacional de países garantes y por tanto le pedimos al Gobierno de Estados Unidos que cese esa injusticia cometida entre el gobierno de Duque y Trump, porque lo único que hizo Cuba fue ofrecer un espacio para que hubiera finiquitado un proceso de paz», subrayó Petro.
Esta semana, unos 80 congresistas colombianos firmaron una carta dirigida a sus homólogos de Estados Unidos para remover a Cuba de la espuria lista de países patrocinadores del terrorismo.
La misiva tiene como destinatarios la vicepresidenta de esa nación y presidenta del senado, Kamala Harris; la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, y también al presidente de la Asamblea General de Naciones Unidas, Csaba Kőrösi.
El representante a la cámara del congreso (bicameral) Gabriel Becerra señaló que esta iniciativa es congruente con el concepto del gobierno de Gustavo Petro acerca de la posición de Cuba con la paz en Colombia.
Estamos haciendo esa solicitud para que haya una orientación distinta, se elimine el bloqueo, y se permita que haya unas nuevas relaciones entre los Estados basadas en el respeto a la soberanía de las naciones.
La semana pasada, en la Juntanza Internacional de Caribe es Mujer, fue presentada una campaña, que había iniciado la organización Codepink en Estados Unidos para sacar a Cuba de la arbitraria lista, a la que se suman cada vez más voces en esta nación suramericana.
En entrevista con Prensa Latina, el alto comisionado para la Paz, Danilo Rueda, también afirmó que Cuba debe ser removida de esa lista.
«Como alto comisionado hemos expresado desde el comienzo nuestra solidaridad con el pueblo cubano. Hemos expresado junto al canciller Álvaro Leyva, en el reinicio del escenario de diálogos con el ELN, una reparación de ese daño causado, reconociendo que fue pisoteada la dignidad del pueblo cubano, de Colombia y la importancia de que sea quitado de esa lista», recalcó.
El concierto de voces para excluir a Cuba de esa arbitraria lista crece en Colombia al tiempo que la búsqueda de la paz es un objetivo primordial.
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