La Casa de América, por interés de la embajada de Chile en España, organizó el comienzo de las actividades en torno a una iniciativa que conmemora los 100 años de la primera edición publicada en Nueva York de su obra Desolación, en 1922.
Primera latinoamericana en ganar el Nobel de Literatura en 1945, la poeta chilena ha sido redescubierta también por su prosa.
Así fue destacada este lunes por el embajador de Chile en España, Javier Velasco Villegas; el director de Casa de América, Enrique Ojeda; y muy en particular por la ministra española de Igualdad, Irene Montero.
El contenido de sus artículos en defensa de las niñas y niños, de justicia social, su constante demanda por el avance de las mujeres y la educación y su potente discurso sobre derechos humanos, descuellan en su trayectoria.
Montero aprovechó el hecho para llamar a demócratas y feministas a movilizarse para la “construcción de alianzas internacionales en defensa de los derechos de las mujeres, los derechos humanos y el antifascismo”.
La titular hizo un parangón entre la brillante y multifacética labor de Mistral y “la victoria de la extrema derecha en Italia y el hecho de que esta, con los aliados de PP y Vox, vayan a ‘gobernar la tercera economía de la zona euro”.
Valoró al Gobierno de Chile como “un faro de esperanza iluminado que ‘enseña a los demócratas cómo luchar para hacer un mundo en el que dignidad sea costumbre y las personas tengan sus derechos garantizados”.
En ese sentido, reivindicó la lucha de Gabriela Mistral para el reconocimiento del derecho a la educación de las mujeres y puntualizó que esta demanda sigue vigente, al recordar que, según los datos de la Unesco, “hay 129 millones de niñas que no van a la escuela en todo el mundo”.
Montero consideró a Mistral como “una de las mujeres más importantes de la literatura y de las luchas latinoamericanas por la democracia, los derechos humanos y el feminismo”.
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