Este domingo el jefe de la iglesia dio un atisbo de apoyo a la reelección del mandatario aunque el lunes rectificó sus palabras y sostuvo que es «el pueblo» quien pide la permanencia de Bukele.
Ahora dos obispos de la Conferencia Episcopal de El Salvador (CEDES) y un sacerdote de la Compañía de Jesús objetaron las declaraciones de Escobar sobre la reelección en 2024.
El tema se mantiene en el país como un punto de discordia entre diferentes sectores que hacen interpretaciones antojadizas y a conveniencia de la Constitución vigente.
Las declaraciones de Escobar pasan por alto que este ejercicio está prohibido en al menos siete artículos de la Constitución de la República aunque el vicepresidente Félix Ulloa opinó que Bukele tiene derecho a presentar su candidatura y deja la solución al pueblo en las urnas.
Las palabras del prelado recuerdan el refrán “Donde dije digo, digo Diego”, una forma de desdecirse de una afirmación.
A sus pronunciamientos de apoyo, la víspera Escobar emitió una nota aclaratoria en la cual sostuvo que no se pronunció «en el sentido de aprobar o desaprobar la posibilidad», pues que esto «le compete a la Corte Suprema de Justicia y al Tribunal Supremo Electoral», dos órganos que hace un año fallaron en favor del mandatario.
Aún tras esta aclaración, el obispo de Zacatecoluca, Elías Samuel Bolaños, informó que la Conferencia Episcopal se reunió la semana pasada, y no se emitió pronunciamiento en torno al tema de la reelección. Por tanto, esta postura es únicamente del Arzobispo de San Salvador.
También Oswaldo Escobar, Obispo de Chalatenango, se desligó del Arzobispo metropolitano. «Monseñor Escobar habla en nombre de su arquidiócesis, no de toda la Conferencia Episcopal», apuntó.
Al respecto de las divergencias el sacerdote jesuita Juan Vicente Chopín, señaló que en la Iglesia católica, los obispos son de territorio delimitado y ellos pueden hablar y emitir juicio para ese territorio, pero no es la voz de toda la Iglesia.
Durante 2021 los líderes eclesiásticos desaprobaron la forma en que fueron destituidos los magistrados de la Sala y el fiscal el 1 de mayo, e hicieron “un vehemente llamado a que se actúe siempre en genuino cumplimiento del orden legal”.
Asimismo hace un año se pronunciaron contra la depuración irregular del sistema judicial y las modificaciones a la Constitución impulsadas por el gobierno para cambiar los artículos pétreos, algo que en el vecino Honduras empujó a un golpe de Estado contra el entonces presiente Manuel Zelaya, en 2009.
Al respecto de la reelección presidencial, los números apoyan al mandatario, pues según un sondeo del Centro de Estudios Ciudadanos de la Universidad Francisco Gavidia casi un 60 por ciento de los consultados apoya la permanencia de Bukele, contra un 23.1 por ciento que se opone, lo cual es indicativo que no solo en la iglesia existe discrepancia.
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