La petición, de la asambleísta Mireya Pazmiño, de Pachakutik, fue aprobada con 103 votos y es el resultado de los trabajos de la comisión de análisis del primer informe a la nación que entregó el mandatario el 24 de mayo pasado.
El documento presentado por Pazmiño señala la inobservancia de las obligaciones del jefe de Estado contempladas en la Constitución y en el Código Orgánico de Planificación y Finanzas Públicas, al no presentar al parlamento el informe de evaluación del Plan Nacional de Desarrollo.
Entre quienes respaldaron la propuesta estuvo el legislador de Revolución Ciudadana Blasco Luna, quien afirmó que es imposible aprobar un informe “tan falso y lleno de mentiras” que demuestra el incumplimiento de las acciones ejecutivas del plan de Lasso.
De 130 metas planteadas, 75 han sido reportadas y 55 son un misterio, no existe información sobre ellas, no dejaremos que siga engañando y destruyendo al país, expresó Luna.
Ni se ha creado el millón de empleos, ni aumentó el salario básico a 500 dólares, ni generó condiciones para un verdadero acceso libre a la educación superior, ni se “ha arreglado el país en 100 minutos», recordó Walter Gómez, asambleísta de la bancada Unión por la Esperanza.
Todo lo contrario, afirmó Gómez, el 70 por ciento de ecuatorianos no cuentan con empleo formal y adecuado, más de 100 mil jóvenes se quedaron fuera de las universidades públicas por falta de presupuesto y ni hablar de la salud o la seguridad pública.
La Asamblea ecuatoriana analizó el informe de Lasso cinco meses después de su presentación, aunque trabajadores y estudiantes rechazaron inmediatamente las cifras incluidas en su rendición de cuentas.
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