Según la administradora Deanne Criswell, hay comunidades que tienen que ser completamente reconstruidas.
Tenemos 17 equipos de búsqueda y rescate todavía en el condado de Lee, en Florida, que van a cada puerta para asegurarse de contabilizar a todo el mundo, dijo en conferencia de prensa.
En este sentido, mencionó el papel de la FEMA de proporcionar alojamiento temporal a las familias y brindar otros tipos de asistencia.
Criswell consideró catastrófico el impacto del ciclón, que atravesó Florida el pasado 28 de septiembre, y refirió cómo todavía hay muchas casas bajo el agua.
En esta jornada el presidente Joe Biden aprobó el aumento de la financiación federal para la asistencia al estado, que cubrirá la remoción de escombros, distribución de alimentos y agua, además del apoyo a los refugios por un periodo adicional de 30 días, después de la declaración de desastre emitida por el mandatario el 29 de septiembre.
De igual forma, el jefe de Estado llegó a la ciudad de Fort Myers, donde los vientos fuertes, lluvias y marejadas del fenómeno dejaron a personas sin hogares y medios de subsistencia.
En ese lugar Biden intercambió con el gobernador Ron DeSantis, la administradora de la FEMA, otros funcionarios, propietarios de pequeñas empresas y residentes afectados por Ian.
“Todos estamos juntos en esto”, afirmó el mandatario a la gente del estado, donde a pesar de las advertencias de la FEMA sobre los posibles efectos catastróficos de Ian, hubo críticas respecto a supuestas demoras en la evacuación de los residentes.
Todavía es desconocida la magnitud real del número de muertos por Ian, aunque recuentos de medios como el canal CNN contabilizan más de 100, gran parte en Florida.
De igual forma es indeterminado el alcance real de los daños, pero de acuerdo con la administradora de la FEMA, quizá sea esta una de las catástrofes más costosas que haya visto la nación norteña en muchos años.
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