Esa institución, encargada de recopilar las estadísticas, prevé finalizar el proceso en noviembre y entregar los datos al Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores (SNAI) para tomar las decisiones correspondientes.
Los incidentes violentos que tuvieron lugar en la cárcel de Cotopaxi los días 3 y 4 de octubre provocaron una pequeña pausa para concluir con el primer censo de los privados de libertad en la historia del país, explicó García.
Ese proceso comenzó el 22 de agosto pasado y busca registrar a los más de 32 mil reos de las 36 prisiones existentes en el territorio nacional.
Desde 2021 unos 400 detenidos han sido asesinados en diferentes enfrentamientos dentro de los centros de reclusión, o sea, bajo custodia del Estado ecuatoriano, mientras las autoridades aseguran que la causa son las disputas entre bandas delictivas.
Independientemente del motivo, muchos ciudadanos culpan de las masacres al gobierno y en particular al presidente Guillermo Lasso por la falta de políticas contra la violencia y la inseguridad en el país.
En medio de esa crisis carcelaria, el gobernante designó este lunes a Guillermo Rodríguez como director general del SNAI, quien se convirtió en el quinto jefe de esa entidad desde que el actual mandatario está en el poder.
Lasso reconoció en una entrevista reciente que existe un 15 por ciento de hacinamiento en los penales y muchos internos están recluidos por delitos menores, por lo cual continuará con los indultos cuando concluya el censo en marcha.
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