¿Acaso el nuevo Gobierno serbio analizará la posibilidad de aplicar medidas punitivas contra Moscú?, se preguntó la jefa de Gobierno, quien afirmó que continuarán la presiones para hacerlo de potencias occidentales contra el nuevo ejecutivo, que seguirá de cerca ese tema.
Pero queremos constatar nuestra posición de que la imposición de restricciones «en gran medida no responde a los intereses naciones serbios», declaró la alta funcionaria.
Tampoco las sanciones son algo que pueda apoyar nuestro pueblo, pues en la década de 1990 estuvimos bajo restricciones y conocemos sus consecuencias negativas, sin que ello cambie para nada la política nacional de un país, constató Brnabic, citada por la televisión local.
Nosotros ahora estamos en una situación muy específica, pues muchos de los países que ahora nos demandan sumarnos a las sanciones contra Rusia están lejos de respetar la integridad territorial de Serbia ni los principios más elementales del derecho internacional, denunció.
Recientemente, el presidente serbio, Alexander Vucic, recordó en la ONU la violación flagrante del derecho internacional por la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) al bombardear su país en 1999.
Vucic afirmó entonces que muchos de los miembros de la OTAN ahora le reclaman a Serbia sumarse a las sanciones contra Rusia por su operación militar especial en Ucrania, cuyo inicio anunció el presidente Vladímir Putin, el pasado 24 de febrero.
Las autoridades serbias demandaron en varias ocasiones el cumplimiento de los acuerdos firmados para poner fin a los bombardeos de la alianza atlántica en 1999, que incluían el reconocimiento de la soberanía de Belgrado sobre la región de Kosovo. mgt/to