En una conferencia virtual denominada Articulación Continental de Solidaridad con Cuba y los desafíos de la unidad, impartida en el contexto del XXXI Encuentro del Movimiento Colombiano de Solidaridad con Cuba (MCSC), explicó cómo con la unidad de las diversas organizaciones de la región se logra romper las trampas del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos.
Describió momentos importantes de la solidaridad continental que, en medio de la pandemia de la Covid-19, logró llevar a Cuba más de 11 millones de jeringuillas para la vacunación contra la enfermedad.
Asimismo, resaltó que recientemente integrantes de la 27 Brigada Latinoamericana y Caribeña de Trabajo Voluntario y Solidaridad con Cuba realizaron una donación de insumos médicos al Hospital Docente Clínico Quirúrgico de Diez de Octubre, de La Habana.
En declaraciones a Prensa Latina, señaló que el actual contexto político latinoamericano es favorable para profundizar esa unidad en la diversidad.
Hoy tenemos gobiernos como el de Colombia, el de México, y otros que permiten reconocernos en mejores condiciones para llevar adelante esa amplia lucha de solidaridad internacional, aseveró.
«Nosotros tenemos que asumirnos como una parte importante de la lucha de nuestros pueblos», manifestó Champa y recordó cómo en las guerras por la independencia del colonialismo europeo, la expresión del internacionalismo estuvo presente en todos los territorios.
En su opinión, hay que impregnar de ese internacionalismo cada actividad que se desarrolle en Nuestra América.
En enero próximo tendrá lugar en Argentina la cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños y llegó el momento para «constituirnos como movimiento, como red continental y expresarnos en los contenidos que van a expresar nuestros presidentes para ampliar los conceptos integración latinoamericana y caribeña a la integración solidaria de nuestros pueblos», expresó.
Para el activista no hay recetas para articular la unidad, pero hay que ser conscientes de que los pueblos y las organizaciones de solidaridad se enfrentan a un vecino poderoso.
En el momento en que el fascismo crece, en el momento en que cuestionan a los movimientos de solidaridad con Cuba, es necesaria la unidad, requiere amplitud y profundidad, para enfrentar el enemigo común, alertó.
Destacó la reciente victoria de Cuba en la ONU donde 185 países votaron contra el bloqueo, solo Estados Unidos e Israel lo hicieron en contra, y Ucrania y Brasil se abstuvieron, en contra del real sentimiento de sus pueblos.
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