De acuerdo con sendos comunicados difundidos por la oficina del primer ministro Rishi Sunak y el Ministerio de Defensa, el contrato por cuatro mil 200 millones de libras esterlinas (cuatro mil 966 millones de dólares) fue adjudicado a BAE Systems, el principal fabricante de armas del Reino Unido.
Los cinco modernos buques del tipo T26 se suman a otros tres ya en construcción en los astilleros de Glasgow, Escocia, y se espera que todos estén listos para formar parte de la flota antisubmarina británica a partir de 2030.
Las acciones de Rusia nos ponen a todos en riesgo, y mientras ofrecemos al pueblo ucraniano todo el apoyo que necesita, también aprovechamos la amplia experiencia del Reino Unido para protegernos a nosotros mismos y a nuestros aliados, y ello incluye la construcción de buques británicos de nueva generación, afirmó el primer ministro Rishi Sunak en un comunicado.
El gobernante conservador británico se encuentra en Bali, Indonesia, donde asiste a la reunión del Grupo de los 20 y donde según su oficina, además de atacar a Moscú y recabar más ayuda militar para Kiev, presentará un plan de cinco puntos para enfrentar la crisis económica global.
El ministro de Defensa británico, Ben Wallace, apuntó, por su parte, que la inversión en las nuevas fragatas T26 tiene como objetivo garantizar que la Marina Real mantenga su capacidad de proteger y defender a la nación.
Los nuevos buques, que tienen casi 150 metros, una velocidad máxima de 26 nudos y una autonomía de siete mil millas náuticas, estarán equipados con sistemas de misiles Sea Ceptor, un cañón de cinco pulgadas y un helicóptero para operaciones específicas.
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