Imágenes difundidas por la televisión al-Suriya mostraron decenas proyectiles RPG, ametralladoras ligeras y medianas, fusiles automáticos y otros de precisión, morteros, granadas de mano y decenas de cajas de balas.
De acuerdo con un oficial de la seguridad, fueron decomisados también misiles portátiles anti blindados y armas de fabricación occidental, sin precisar su tipo o su cantidad.
La víspera, unidades conjuntas del ejército y las fuerzas de seguridad liberaron por completo el vecindario Tariq al-Sad de la ciudad de Deraa, último bastión del grupo terrorista Daesh en el sur del país.
En el operativo fueron eliminados decenas de integrantes de esa organización inscrita en la lista del terrorismo internacional, incluidos cabecillas, además de desactivar cuatro coches bombas que los radicales planeaban detonar mediante suicidas.
Según el ejército sirio, el Daesh perdió la capacidad de reagruparse y organizar ataques debido al doloroso golpe que recibió y la pérdida de su sala de operaciones en el sur de Siria, concluyeron los militares.
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