Durante su intervención, Miqati subrayó que la salida del colapso debe ser a través de una solución a la brevedad mediante la elección del presidente de la República, la formación de un nuevo gabinete y la aceleración de las reformas deseadas.
El jefe del Consejo de Ministros en funciones reiteró la voluntad de completar todo lo necesario para devolver a Líbano al mapa del equilibrio financiero y monetario en la balanza de pagos y la cuenta corriente.
Sobre este tema, el titular del gobierno destacó que controlar el deficit en el presupuesto conducirá a la sostenibilidad de la deuda pública y agregó la oportunidad de reforzar este enfoque a través del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Miqati indicó que después del acuerdo a nivel personal en abril pasado el mayor desafío constituye completar la aprobación de las leyes y procedimientos a fin de concluir el pacto con la Junta Directiva del FMI.
El primer ministro añadió que las acciones previas giran en torno a la aprobación por parte del gobierno del plan de recuperación, la ley de reestructuración y reforma del sector bancario, el presupuesto¸así como la normativa de control de capitales.
Al abordar la realidad de la banca y las perspectivas de su futuro, Miqati calificó de severa y peligrosa la crisis y demandó esfuerzos de todas las autoridades políticas, monetarias y bancarias para contener los desequilibrios existentes y hacer avanzar al sector hacia la recuperación.
La cita organizada por la Unión de Bancos Árabes reunió a ministros libaneses, políticos, presidentes de sindicatos y representantes de las misiones diplomáticas acreditadas aquí de Arabia Saudita, Túnez, Marruecos, Canadá, Kuwait, Iraq, Italia, Bélgica, Argelia, Grecia, Francia y Egipto.
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